Los trastornos de alimentación son aquellos que se caracterizan por presentar alteraciones graves en la conducta alimentaria, y los más frecuentes son la anorexia y la bulimia nerviosas, que por lo general padecen los adolescentes, principalmente las mujeres, aunque ya hay más casos de varones.
Un trastorno en la alimentación es una enfermedad causada por la ansiedad y por una preocupación excesiva por el peso corporal y el aspecto físico; y se da cuando una persona coloca a la comida como centro de toda su vida. De hecho hoy se consideran a los trastornos alimenticios una nueva epidemia del culto al cuerpo.
En la última década se incrementó de forma abrupta la cantidad de afectados por anorexia, siendo en su mayoría mujeres jóvenes de entre 14 y 18 años, aunque los varones, las mujeres maduras y los menores de 12 años (niños y niñas) comienzan a ser víctimas de esta afección.
Por su parte, la bulimia se da con más frecuencia que la anorexia nerviosa, siendo su incidencia cuatro veces mayor. Los estudios muestran que entre el 3 y el 10% de las chicas la padecen, y que entre el 50 y el 60% de los casos se cura, el resto de pacientes hacen crónica la enfermedad.
Pero ¿a qué conductas deben prestar suma atención los padres? A hacer deporte en exceso, tener preferencia por los alimentos Light, tener un estado de ánimo triste con grandes cambios de humor y aislarse de forma continua.
En relación con los alimentos: hacen trozos pequeños, los esparcen por el plato, revuelven la comida, la secan con servilletas para evitar todo tipo de grasa. Padecen estreñimiento debido a su escasa dieta y tiene dificultades para dormir bien. En el caso de la bulimia acumulan golosinas y comen con la sensación de no poder parar.
Esta plaga de la búsqueda de la perfección hace que se persiga un ideal, que no existe, y que a consecuencia se distorsione la realidad frente al espejo.
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jueves, 3 de enero de 2008
Los trastornos alimentarios: un mal adolescente
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