A pesar de los estudios que indican que los jóvenes cada vez leen menos, siempre hay un grupo a los que les gusta la lectura. Se interesan por las últimas novedades literarias, y también por adaptaciones que hacen al cine sobre algunos clásicos literarios. Para ellos una cosa no quita la otra.
Y sabiendo de este colectivo nació una nueva revista literaria online, El templo de las mil puertas, que está destinada a la literatura juvenil. En ella se puede encontrar desde noticias, críticas, entrevistas, reportajes hasta un catálogo con las novedades editoriales.
Con apenas un mes de lanzada a la gran red, tuvo una importante acogida. El segundo número se espera para febrero.
Vía: Papel en blanco
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lunes, 21 de enero de 2008
Una nueva revista literaria online para jóvenes
Publicado por DC en 5:06
Etiquetas: información, internet, literatura
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El duelo
Como si la vida fuera tan larga como para verla pasar asomado de una ventana y fumando cigarrillos, unos tras otro. Realmente es el reflejo de cómo se va consumiendo una persona en cada bocanada de humo que inhala, la cara cada ves más acartonada, los gestos de expresión no pueden dar más, los músculos de el cuerpo cada ves se tensan más. El único medio punto de relajación es el exhalar todo ese humo que se va como la vida misma.
¿Qué hacer? ¿Qué pensar?
¿Qué es lo que uno piensa cuando no esta acostumbrado a esperar…?
¿Qué hacer cuando nunca se respeto ese imponente espacio de tiempo y nunca se tomo la delicadeza de voltear para ver que ahí estaba…? Que era una opción.
Atado de manos y atado de pies pero con una firme convicción la cual es vivir y dejar vivir.
El duelo de la vida te lleva a tomar decisiones. Nunca vas a saber con exactitud si es la decisión correcta o simplemente un error más anotado en la ya larga lista. Solo queda esperar…
Las paredes y la soledad ya no son tus aliados nunca más, la ventana cada día se hace más angosta y los cigarrillos parecen ya no alcanzar.
Solo queda decir que hay duelos que se ganan, hay duelos que se pierden y hay duelos que se viven.
J.F.R.
Crónica de una muerte anunciada…
Como ya lo venia diciendo, pensando y sintiendo, la cuesta toco el piso, pero fue tan grande el impacto que incluso abrió un boquete en el mismo y se enterró unos metros bajo tierra.
Estando bajo tierra, la desesperación se apodera de mí, la frustración me mira a los ojos y la impotencia me dice algo en tono burlesco sobe mi hombro, justo en mi oído derecho.
Veo hacia arriba y hay luz, eso quiere decir que hay esperanza, veo a mi lado y hay tierra, eso quiere decir que hay de donde me pueda sostener si mis piernas se doblan hay ,aire que me permite tranquilizarme con grandes bocanadas de oxigeno si algo se apodera de mi, me mira a los ojos o simplemente me hace burla por la espalda. Pero sobre todo estas tú, clavada en el centro de mi frente, que a veces me das una fuerza y una determinación que siento que puedo salir de ese hoyo con tan solo un dedo, y otras veces siento que tu recuerdo me jala por los tobillos y me hunde unos cuantos metros más….
Esta vez no voy a ser el tipo arrebatado con ganas de salir luchando de esa trampa en la cual caí. No voy a utilizar mi fuerza para escalar hacia la inminente salida ni tampoco voy a utilizar mi inteligencia para ingeniar el plan perfecto para la perfecta huida.
Hoy decidí, -que solo voy a esperar.-
Decidí que utilizare mi fuerza para ejercitar mi alma y mi fuerza de voluntad, decidí que voy a utilizar mi inteligencia para mientras estoy solo en la oscuridad planear la estrategia perfecta para que seas feliz mi amor, y te prometo utilizar mi arrebato para sacar todos esos demonios que llevo dentro de mi mente y mi corazón…ahí, donde nadie me ve, ahí donde nadie me escucha, donde nadie me juzga, donde nadie me critica, donde puedo gritarle al tiempo que es un hijo de puta por ponerte en mi vida cuando no correspondía o solo decirle gracias… porque me dejo conocerte, donde solo estoy yo la oscuridad y la tierra .
Tengo mucho que pensar, tengo mucho que esperar, tengo mucho que decir y tengo mucho que callar. Tengo… te tengo o no te tengo?
J.F.R.
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